Líneas de vida horizontales
¿Qué es una Línea de vida?
La línea de vida es un dispositivo de anclaje flexible, con una desviación máxima de 15º sobre la horizontal. Las líneas de vida pueden estar diseñadas para conectarnos directamente con un mosquetón o a través de un carro de desplazamiento. Éste permite realizar el recorrido por la línea de vida sin tener que desconectarnos. Los carros, como cualquier conector, para desconectarlos de la línea de vida hay que realizar dos acciones manuales, consecutivas y separadas. La norma EN795:2012, cambia sustancialmente con respecto a la UNE EN795:1997. Destaca el hecho de que se especifica en su “Objeto y campo de aplicación”, que los dispositivos de anclaje amparados por esta norma son para un único usuario. Para que estos dispositivos puedan ser usados simultáneamente por dos o más usuarios, debe cumplirse la especificación técnica CEN/TS16415:2013. La línea de vida TOTAL® es conforme a la norma EN795:2012 y a la especificación técnica CEN/TS 16415:2013.
La actual norma EN795:2012 excluye el uso de abrazaderas de perno en U (los llamados habitualmente perrillos), por su falta de seguridad.
Las líneas de vida TOTAL SW cumplen con lo establecido en la NTP843, sobre dispositivos de anclaje del tipo C, donde se establece una distancia mínima de seguridad entre el cable y la superficie de anclaje. Esto puede darse por la catenaria natural del cable, el viento, las dilataciones térmicas y la relajación mecánica del mismo. Las líneas de vida TOTAL SW están fabricadas íntegramente en acero inoxidable, siendo su acabado cromado o electropulido (terminales prensados y roscas), lo que le confiere una gran capacidad antioxidación.
Las líneas de vida sólo pueden ser instaladas por un técnico que garantice los procedimientos del fabricante (instalador autorizado).
Conforme al Art.19 de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales, los usuarios de la línea de vida tienen que tener una formación suficiente y adecuada.
En virtud de lo establecido en el Art.41 de la LPRL y la norma EN365, las revisiones periódicas de estos sistemas no pueden exceder de los 12 meses